Cunard, la compañía naviera más antigua en activo, continúa atrayendo a sus legendarios barcos a multitud de pasajeros de cruceros. Enamorado de la “época dorada y de los espléndidos años de las glamorosas travesías transatlánticas, Cunard es una histórica compañía de cruceros que oscila entre la antigüedad y la modernidad. Con motivo de su 180 aniversario, este año hacemos un repaso de la historia de su creación, desde sus inicios hasta la consolidación de su posición actual.
Sumario:
.- 1.838: Un empresario, una idea y el comienzo de una historia
.- 1.850: Un competidor, un naufragio y un ascenso
.- 1.940: Una alianza para un nuevo comienzo
.- 2.000: Sostenibilidad asegurada y consolidación en su posición de liderazgo
.- En la actualidad: ¿Qué cruceros se pueden realizar con Cunard?
1.838: Un empresario, una idea y el comienzo de una historia
Cunard, su nombre se impone, impresiona, fascina. Pero ¿por qué? Esta empresa, fundada en 1.838 por Sir Samuel Cunard, operaba principalmente para el transporte de mercancías y correo, llamándose entonces British and North American Steam Packet Company. Más tarde pasó a ser conocida como Cunard Line.
En ese momento, el gobierno británico quería fletar barcos postales entre Cornualles y Nueva York con el fin de transportar el correo entre los dos continentes. En ese momento, muchas empresas de barcos de vapor ofrecieron sus servicios pero no lograron ganar el contrato. Ahí es cuando llegó Samuel Cunard.
Sin ningún barco en su poder, pero con 55.000 libras en el bolsillo, este empresario compró el Unicorn, un barco de vapor que pertenecía a una línea de Montreal. Posteriormente, construyó tres nuevos barcos: el Britannia, el Arcadia y el Caldonia. Todos ellos ofrecían servicios de entrega entre Liverpool y Halifax.
Sam Cunard, que entonces tenía una sólida reputación como un sabio hombre de negocios y diplomático, hizo crecer por 10 su pequeña empresa de transporte de mercancías. Como anécdota, fue admitido en la famosa American Society of Travel Agents (Sociedad Americana de Agentes de Viajes) gracias a su papel fundador en el desarrollo de los viajes transatlánticos.
Dos años más tarde, en 1.840, la compañía que ahora adopta el nombre de Cunard Line introdujo cuatro barcos de vapor para viajes regulares entre Southampton y Nueva York transportando a bordo carga y pasajeros.
« El 4 de julio de 1.840, el barco conocido como Britannia, que en ese momento se llamaba Cunard, zarpó del puerto de Liverpool con una vaca lechera a bordo con el fin de proporcionar leche fresca a los pasajeros en esa travesía transatlántica de 14 días.”
Aunque no lo parezca, el Britannia y sus barcos hermanos fueron verdaderos pioneros. Con 1.150 toneladas, el Britannia tenía 63 metros de eslora, bastante alejado de los 333 metros de eslora de los gigantes actuales. En aquel momento, ese barco podría transportar un máximo de 115 pasajeros y 225 toneladas de carga, navegando a una velocidad de 9 nudos. En la actualidad, los barcos de crucero están alcanzando una velocidad de unos 23 nudos.
1.850: Un competidor, un naufragio y un ascenso
En la década de 1.850 otras compañías comenzaron a ofrecer servicios transatlánticos similares y, de repente, Samuel Cunard se encontró luchando por mantenerse por delante de la competencia pues, la mayoría de estas otras navieras, incorporaron embarcaciones más grandes y rápidas. En cualquier caso, Samuel Cunard, conocido por su terquedad, era consciente de que mientras sus competidores utilizaban las tecnologías más modernas de la época, los barcos de Cunard todavía estaban anclados en el pasado.
Cuando murió en 1.865, la modernidad tampoco llamó a la puerta de su empresa. Su sustituto, Charles MacIver, era un hombre igualmente tradicional que también tuvo que enfrentarse al surgimiento de una prestigiosa, prometedora y nueva línea que dominaba el mercado: la famosa White Star Line.
En 1.863, con la finalidad de satisfacer las solicitudes de sus clientes, Cunard creó un segundo servicio con travesías más habituales entre Liverpool y Nueva York. Hasta 1.881 la compañía no lanzó su primer crucero transportando únicamente pasajeros. En los años de la posguerra, Cunard se convirtió en el primer transportista de pasajeros.
De hecho, el destino ayudó a Cunard pues la White Star Line, aunque muy prometedora, parece que estaba condenada de antemano. El triste hundimiento del Titanic en 1.912 y la destrucción de dos de sus barcos durante la Primera Guerra Mundial, supusieron duros golpes para esta nueva compañía. Después, en un esfuerzo mutuo, White Star Line se asoció con Cunard Line con el objetivo de que las dos compañías pudieran ayudarse mutuamente a mantenerse a flote.
A finales de la década de 1.940, para cruceros transatlánticos Cunard Line tenía exclusivamente a los barcos Queen Mary y Queen Elizabeth. A lo largo de su historia, Cunard ha sido la única compañía que ha seguido cruzando regularmente los océanos en transatlánticos después de la década de 1.970.
Otras empresas, antes de quebrar, intentaron hacerse con parte de este jugoso mercado, por ejemplo, French Line, Italian Line y United States Line. Otras navieras, como, Swedish America Line, Holland America Line y Home Lines continuaron su actividad.
Sin embargo, el servicio de ruta entre Nueva York y Europa sólo era ofrecido por Cunard. Con el tiempo, el barco Queen Mary 2 cruzará el Atlántico en numerosas ocasiones, convirtiendo a Cunard Line en la única manera de cruzar este tramo de océano.
1.940: Una alianza para un nuevo comienzo
Asociada con White Star Line, la nueva compañía « Cunard-White Star Line » operaba con gran cantidad de barcos pero, todos ellos, bastante anticuados. Se desguazaron varios barcos de la White Star Line y se construyeron dos nuevos barcos: el Queen Mary (1.935) y el Queen Elizabeth (1.939), dos embarcaciones que se convertirían en legendarias.
Finalmente, Cunard recompró las acciones que poseía White Star Line y regresó a su nombre original. Poco a poco, la empresa fue prosperando gracias a la adquisición de una serie de pequeñas compañías navieras como la reciente Norwegian American Line y Ellerman Lines. Introdujo nuevos barcos, entre los que se encontraba el famoso Queen Elizabeth 2, que reinventaría el espíritu de la industria de los cruceros.
« Con sus lujosas cabinas, instalaciones de alta calidad y un número cada vez mayor de pasajeros, Cunard está experimentando un nuevo avance. »
En 1.968, el barco Queen Mary fue vendido a la ciudad de Long Beach (California, USA) convirtiéndose en hotel y centro de conferencias. Supuestamente embrujado, todavía permanece allí después de haber sido una atracción ribereña durante más tiempo del que navegó por los mares.
A principios de la década de 1.990, cuando David Dinkins se convirtió en el primer alcalde negro de Nueva York, Cunard decidió centrarse exclusivamente en los cruceros y no en el comercio. Se vendieron todos los cargueros de la compañía, decisión que reforzó la posición de Cunard en el sector de los viajes de lujo.
Posteriormente, en 1.998, esta línea de cruceros fue adquirida por Carnival Corporation, que ahora también es propietaria de P&O Cruises, Carnival, Costa Cruceros, Holland America, Seabourn Cruises y Princess Cruises. De hecho, el grupo se convirtió en el principal operador mundial de cruceros.
2.000: Sostenibilidad asegurada y consolidación en su posición de liderazgo
Cuando Cunard entró en el siglo XXI como miembro de Carnival Corporation, comenzó a reinventarse para adaptarse al mercado actual de cruceros. Las embarcaciones más antiguas fueron sustituidas y renovadas. De esa forma, en 1.998 renació el Queen Mary 2, seguido en 2.007 por el Queen Victoria y en 2.010 por el Queen Elizabeth.
En enero de 1.998, Cunard construyó el Queen Mary 2, el barco más grande, con más eslora, más alto y más caro jamás construido, que fue amadrinado por Su Majestad la Reina de Inglaterra. En mayo de ese mismo año, el Queen Elizabeth 2 se hizo cargo de la ruta del Atlántico Norte, entre Southampton y Nueva York, reubicado para operar cruceros desde esa ciudad inglesa para el mercado británico. En noviembre, el Queen Elizabeth 2 se convirtió en el barco más antiguo que ha servido bajo bandera de Cunard.
Vendido en 2.007 por 100 millones de dólares, con el fin de mantener una flota de tres buques, Cunard ordenó su tercer Queen Elizabeth, un barco de 90.000 toneladas gemelo del Queen Victoria, que entró en servicio en 2.010.
En el año 2.017, Cunard anunció la construcción de un cuarto barco. Cuando sea botado en 2.022, este buque de nueva generación será, en términos de capacidad de pasajeros, el mayor de la flota de la compañía. Con 113.000 toneladas de registro bruto transportará a 3.000 pasajeros y se convertirá en el primer buque de la compañía que se construye desde el debut del Queen Elizabeth en 2.010.
En la actualidad: ¿Qué cruceros se pueden realizar con Cunard?
Famosa por sus cruceros transatlánticos y el magnífico barco Queen Elizabeth 2, para sus pasajeros actualmente Cunard despliega una flota de tres barcos. Todos ellos, compitiendo en refinamiento, autenticidad, lujo y confort de alto nivel.
Hoy en día, la naviera destaca por sus lujosas ofertas de catering, su refinada gastronomía, sus elegantes vajillas y cubertería, su prestigioso servicio y su decoración siempre a la vanguardia de la excelencia. Cuidar de sus pasajeros y ofrecerles lo mejor del mundo de los cruceros es la filosofía que aplica esta compañía de cruceros. Aunque Cunard ofrece principalmente la oportunidad de navegar en el Mar del Norte o en cruceros transatlánticos, en el año 2.020 también planea dirigirse hacia mares más fríos, con nuevas rutas en dirección a Alaska. Más información aquí:
Para celebrar su 180 aniversario con solemnidad, Cunard ofrece algunas ventajas a los pasajeros de cruceros que deseen embarcar con la compañía en este aniversario. Por ejemplo, con motivo de este evento histórico, Cunard ofrece un crédito a bordo de 90 $ por persona y cabina. Los detalles de estas ofertas son los siguientes:
– Reservar el crucero Cunard para 2.020, por un mínimo de siete noches, antes del 30 de noviembre de 2.019.
– Desde la categoría cabina con balcón, Cunard ofrece 90 $ de crédito a bordo y por cabina. Con un máximo de 180 $. Estos últimos se acreditarán automáticamente en la cuenta de los pasajeros al llegar a bordo.
Para obtener más información sobre futuros cruceros Cunard, no dude en llamar a uno de nuestros asesores de Cruceros.es al 91 26 91 177.
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